lunes, 13 de febrero de 2012

La Nada

Perdí la cuenta del tiempo que llevaba allí. Podían haber sido días, meses o años. O incluso podían haber sido solo unos minutos. No había forma de saberlo en un sitio en el que no había nada, excepto una blancura que se extendía por todas partes y no parecía tener fin.

Llamaba a ese sitio la Nada, porque no se me había ocurrido un nombre mejor. Aburrimiento también hubiese sido un buen nombre, porque eso era lo que sentía. Al no poder moverme, no podía hacer mucho más que no fuese pensar e intentar recordar mi vida, esa vida tan llena de colores, de sentimientos y de tantas otras cosas que empezaba a olvidar.

Hubiese dado cualquier cosa por saber si esa vida había sido real, que no era un simple desvarío de mi mente enloquecida por el aburrimiento. Repasaba mis recuerdos una y otra vez intentando descubrir una prueba de que eran de verdad pero cuando me sumergía de lleno en ellos buscando esa prueba, menos claros se volvían.

Una clase de historia aparentemente aburrida, se desdibujaba y se transformaba en una lucha con dragones y duendes. Todo se volvía extraño, mezclando ficción con realidad, si es que algo de eso había sido real.

Me preguntaba si estaba muerta. Tal vez eso era el Cielo. O el Infierno. Tal vez había cometido un crimen tan grave que mi castigo era una eternidad de soledad y aburrimiento. ¿Qué delito podía ser tan horrible como para ser castigado con aquello? No podía saberlo, desconocía por completo cómo había llegado a aquel lugar.

Luchaba por respirar, hablar o hacer cualquier cosa con mi cuerpo que no fuese estar completamente inmóvil, pero sin éxito. Mis músculos habían perdido totalmente su capacidad de movimiento y mis pulmones no parecían querer llenarse de oxígeno. Y sin embargo no me ahogaba. Tampoco sentía sed o hambre, y estaba casi segura de que mi corazón no latía.

"Debo de estar muerta"

¿Era eso lo que le esperaba a todo el mundo después de la muerte?¿Era el paraíso soñado por tanta gente que creía en la inmortalidad del alma? Pues, para decirlo sinceramente, menuda decepción.

7 comentarios:

  1. Muy claustrofóbico tu primer relato publicado en el blog. Me gusta tu estilo. ¿Es la primera parte de algo más largo o no tiene continuación?
    Gracias por pasarte por mi blog. Un beso.

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  2. ¡Hola!
    Me gusta como escribes, te sigo ^^
    ¿Me sigues? :)
    Blog: http://unmardelibros-kate.blogspot.com/

    ¡Saludos! ^^

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  3. Hola ^^
    Azalea: no tenía pensado que tuviese continuación pero quizás algún día haga una segunda parte.
    Estefanía: me alegro que te gustase, yo también te sigo ^^
    Gracias a las dos por comentar. Un saludo ^^

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  4. ¡Hola! La historia como la menciona Azalea es muy claustrofóbico, desolador y debo agregar que desesperanzador.

    Tu relato refleja una fuerte influencia a la religión o eso me da a entender al describir un personaje que se encuentra atrapado en el limbo.

    Yo te sigo a pesar de que mi blog no se trate de literatura.


    ¡Salu2!

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    Respuestas
    1. Hola ^^
      Yo soy atea así que lo de la influencia de la religión no es del todo cierto, aunque si que es verdad que me he inspirado un poco en la religión y el limbo para crear "la Nada".
      Gracias por tu comentario y por seguirme ^^

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